Te sentí mío
nos sentí nuestros
nos sentí uno
por un ratito
Pero seguimos sangrando
y no sos mío
ni soy tuya
ni somos nuestros
No nos curamos
la cabeza
ni mucho menos
el corazón
Te abracé lo más fuerte que pude
e igual
no te solucioné
las fisuras
en el alma
ni en la mente
No reparé los muebles rotos
en los recovecos más oscuros
de tus profundidades
No te sacié con mi carne
con mis palabras
ni con mi risa
No fui suficiente
No fui
No fuiste
No fuimos
Hermoso volver a pasar por acá. Saludos.
ResponderEliminarHermoso. Visitame si queres, estoy empezando ❤️ Pasameunacurita.blogspot.com
ResponderEliminarNo ser. Tremendo sentimiento.
ResponderEliminarBesos y gracias por tus palabras en mi blog :)
te gusta idea?
ResponderEliminarMe encanto! Me sentí muy identificada con algo que me paso hace tiempo.
ResponderEliminarme encanta como escribes Te leo y me quedo por aqui
ResponderEliminarwow... pocas veces me quedo sin saber que decir... por dios!!!! qué intensa!! cada palabra tuya, me fue sumergiendo en ese laberinto de no ser nadie, de no ser, ni significar nada para la otra persona, de igual forma para contigo... insuficientes.. magnífico, muy buen escrito, hace tiempo que no disfrutaba de uno como el tuyo, mis felicitaciones...
ResponderEliminarLo trágico de saber que darlo todo (o casi todo) no siempre nos genera la unión deseada. No ser, no haber sido...
ResponderEliminarMe encantó, un abrazo!